De los cuadernillos de escritura a expresiones como Ola k hase, WTF o OMG. Las redes sociales han sido una revolución para la ortografía de los menores, que han reducido su escritura a un lenguaje abreviado y simple de vocabulario. Los jóvenes españoles se han acostumbrado a adaptar sus palabras al lenguaje tecnológico y a escribir tal y como hablan.
Desde Smartick, la herramienta educativa líder en educación online, señalan que leer y escribir textos continuamente con errores gramaticales crea una representación inadecuada de las palabras y fomenta las faltas ortográficas de forma inevitable. Y es que aseguran que a los niños les basta con leer entre seis y ocho veces una palabra para que pase a formar parte de su léxico.
El problema es que muchas veces lo hacen en redes sociales. Mientras que el tiempo de lectura desciende, un 35% de los españoles no lee según el Barómetro de Hábitos de Lectura de 2021, los menores se encuentran sumergidos en las redes sociales: el último informe de Qustodio refleja que pasan más de 4 horas diarias conectados vía online.
Para evitar que adquieran malos hábitos lingüísticos, Smartick cuenta con Smartick Lectura, un programa de aprendizaje online personalizado para que los menores de entre 4 y 14 años desarrollen su comprensión lectora, realicen ejercicios ortográficos y adquieran un conocimiento lingüístico desde la base.
Y es que desde Smartick Lectura señalan que una buena escritura contribuye a que los menores:
- Potencien su creatividad
- Aumenten su capacidad de aprendizaje
- Ordenen su razonamiento
- Incrementen su autoestima
- Desarrollen su sentido crítico
En el lado contrario, los niños con mala ortografía suelen cometer errores como:
- Confundir "a ver" y "haber".
- Uso incorrecto de la h Mezclar "ahí", "hay" y "ay".
- Mal uso del "porque", "por qué" y "porqué".
- Huir de los signos de puntuación, principalmente comas.
- Olvidar las tildes.
- Escribir nombres propios en minúsculas.
- Liar la b y la v.
Muchos de estos problemas están muy arraigados en el vocabulario de los menores y no es sencillo solucionarlos a corto plazo. Los expertos de Smartick Lectura recomiendan adquirir hábitos educativos encaminados a mejorar la lingüística de los menores, como incorporar a su rutina un rato de lectura diario y un repaso de ejercicios ortográficos, como los que Smartick Lectura ofrece.